ZIRCÓN

El zircón o circón es un silicato de zirconio. Su color puede ser amarillo, café, naranja, rojo, violeta, azul, verde o puede ser incoloro por lo que cubre todo el espectro de colores. Su aspecto puede ser transparente a traslucido.

Su variedad en cuanto a colores se debe a la presencia de elementos radioactivos en muy pequeñas cantidades como el uranio y el torio.

Posee un alto índice de refracción y es un excelente dispersor por lo cual presenta un brillo alto y un fuego intenso que hacen que se asemeje visualmente al diamante, aunque sin su dureza característica.

El valor de un zircón depende de su color, claridad y tamaño. El color más valioso es el azul.

Los zircones más comunes son los de color café-grisáceos y los rojizos. Los cafés son a menudo tratados con calor para obtener zircones incoloros o azules. Exponerlos a la luz solar por mucho tiempo puede causar que pierdan parte de su color.

Su nombre provendría del árabe "Zarqun", rojo o del persa "Zargun", dorado.

El zircón es el mineral más antiguo de la Tierra del que sepamos. Ejemplares del oeste de Australia datados revelaron tener alrededor de 4.4 mil millones de años. Por su resistencia y edad, representan una cápsula de tiempo de la historia geológica de nuestro planeta.

A la variedad café rojiza se le solía llamar "jacinto". Bajo este nombre se le menciona en la Biblia: la encontramos entre las 12 piedras del Pectoral de Aarón cuya confección habría pedido Dios a través de Moisés. En el libro de las Revelaciones también se le vincula con la fundación de la Nueva Jerusalén.

En la mitología hindú se habla del árbol místico Kalpavriksha, el cual se dice es capaz de cumplir cualquier deseo. Este árbol divino tendría zircones verdes por hojas según los escritos en sánscrito.

Piedra de armonía, valentía y fuerza, desde la Edad Media se cree que el zircón es capaz de facilitar el sueño, reforzar el honor, propiciar la sabiduría y atraer la prosperidad. Usada de talismán de protección alejaría calamidades y malos espíritus.

Se considera que genera serenidad, poniendo a disposición fuerza moral y psíquica para superar estados de tristeza y miedo. Alinea el cuerpo físico con los cuerpos psíquicos al participar en la regulación de los flujos energéticos del cuerpo.

Gema calmante, se dice que alivia dolores, ampollas y calambres. Además sería benéfica para el sistema cardiovascular, mejoraría la libido y prevendría infecciones. Sería de gran ayuda para quién padece de alergias respiratorias, asma e infecciones pulmonares.

Zircones de calidad para joyería se encuentran en yacimientos en Camboya, Sri Lanka, Tailandia, Burma (Myanmar), Australia, Estados Unidos, Sudáfrica y Francia.

Australia representa actualmente más del tercio de la producción mundial.

Es a menudo confundido con la zirconia, un compuesto químico sintetizado en laboratorio usando zircón y que también podemos hallar en la naturaleza con el mineral baddeleyita.

La zirconia se emplea de sustituto asequible al diamante pero también de material refractario y aislante, como abrasivo, en reactores de avión, como pigmento para cerámica o de alternativa a la porcelana para la fabricación de piezas dentales.